viernes, 6 de marzo de 2009

El poema escatológico (aprende, Bécker!)

De los placeres sin pecar
El más dulce es cagar,
Con un periódico extendido
Y un cigarrillo encendido,
Queda el culo complacido
Y la mierda en su lugar.

Cagar es un placer,
De cagar nadie se escapa;
Caga el Rey, caga el Papa,
Caga el buey, caga la vaca,
Y hasta la señorita más guapa
Hace sus bolitas de caca.

Viene el perro y lo huele.
Viene el gato y lo tapa.
Total, en este mundo de caca,
De cagar nadie se escapa.

Que triste es amar sin ser amado,
Pero más triste es cagar sin haber almorzado.

Hay cacas blancas por hepatitis,
Las hay blandas por gastritis;
Cualquiera que sea la causa que siempre te alcanza,
Aprieta las piernas duro,
Que cuando el trozo es seguro,
Aunque esté bien fruncido el culo
Ser por lo menos, ......PEDO SEGURO!!!!!!

No hay placer más exquisito,
Que cagar bien despacito.


Vosotros que os creéis sagaces
y de todo os reís,
Decidme si sois capaces
de cagar y no hacer pis.

Caga tranquilo,
caga sin pena,
Pero no se te olvide
tirar de la cadena.


En este lugar sagrado
donde acude tanta gente,
Hace fuerza el más cobarde
y se caga el más valiente.

Estoy sentado en cuclillas,
En este maldito hoyo...
¿ quién fue el hijo de puta
que se terminó todo el rollo?...

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Cielos, dan ganas de... ir al baño xD

Skale dijo...

y digo yo... ¿por qué Bécquer y no Góngora, por ejemplo? o,o